En una de las metrópolis más imponentes del mundo, se encuentra una residencia que combina la opulencia de la cantera y los suelos de mármol con la sofisticación de las obras de arte. Pero, al mismo tiempo, esta joya arquitectónica abraza el diseño moderno, líneas limpias y la tecnología de vanguardia en sonido y conectividad. En su corazón, una escalera circular imponente, que conecta el sótano con los dos pisos superiores, da la bienvenida a quienes se aventuran en su interior.

Lo que verdaderamente roba la atención es el majestuoso domo de vitral de más de 20 metros cuadrados que se alza en lo más alto. Su diseño, sobrio pero elegante, está repleto de detalles y colores que crean un espacio impresionante, fusionando lo moderno con la esencia clásica de la arquitectura circundante.

Desde la azotea, cristales templados protegen de los rayos UV y el calor extremo, cuidando el ambiente interior con una vista panorámica espectacular.

Este proyecto es pura magia, una sinfonía de luz y elegancia que se oculta en el corazón de la gran ciudad.